sábado, 26 de septiembre de 2009
EDUCACIÓN POLÍTICA
Baruta, 15 de agosto de 2009
El sistema capitalista es un mecanismo perverso y fallido. Es posible que se mantenga por mucho tiempo, pero la mayoría de sus integrantes son inseguros, infelices y por naturaleza irresponsables sociales. Cuando se debilitan las fuerzas físicas con que se sustentan, provocan la desobediencia y la revuelta popular. En consecuencia, es urgente pensar en un sistema alternativo que le proporcione la mayor suma de felicidad posible al pueblo, aspiración legitima del Libertador Simón Bolívar. Hoy día en Venezuela se propone el Sistema Socialista Bolivariano.
Ahora bien, no habrá jamás verdadero socialismo bolivariano sin una educación política, ni autoridad razonable sin costumbres republicanas. Las costumbres republicanas son las que permiten las libertades sociales para que se ejerza la voluntad popular y obedezca a una razón social. Por consiguiente, son las costumbres republicanas las que garantizan la fuerza moral de un gobierno socialista bolivariano, y estas costumbres republicanas deben ser obra de la educación política.
El ser revolucionario bolivariano es un estado mental positivo, donde sentirse invencible frente a las adversidades mas difíciles es una cuestión de honor. Se alimenta este estado mental de una educación política, la cual el maestro Simón Rodríguez la llamaba: “Educación Mental”, esta tiene como propósito, que el ciudadano y la ciudadana se informe de todo lo que acontece tanto nacional como internacional, que se eduque para formarse una voluntad invencible y que aprenda bien algún oficio o profesión para ser útil en estrecho contacto con la realidad social del pueblo, con el fin de derrotar la ignorancia política del pueblo y la alucinación de muchos gobernantes.
Siempre, al terminar de escribir mis opiniones políticas, expresare mi respeto al lector que este o no de acuerdo con mis ideas. Gracias.
Tulio Marín CI 2999618
El sistema capitalista es un mecanismo perverso y fallido. Es posible que se mantenga por mucho tiempo, pero la mayoría de sus integrantes son inseguros, infelices y por naturaleza irresponsables sociales. Cuando se debilitan las fuerzas físicas con que se sustentan, provocan la desobediencia y la revuelta popular. En consecuencia, es urgente pensar en un sistema alternativo que le proporcione la mayor suma de felicidad posible al pueblo, aspiración legitima del Libertador Simón Bolívar. Hoy día en Venezuela se propone el Sistema Socialista Bolivariano.
Ahora bien, no habrá jamás verdadero socialismo bolivariano sin una educación política, ni autoridad razonable sin costumbres republicanas. Las costumbres republicanas son las que permiten las libertades sociales para que se ejerza la voluntad popular y obedezca a una razón social. Por consiguiente, son las costumbres republicanas las que garantizan la fuerza moral de un gobierno socialista bolivariano, y estas costumbres republicanas deben ser obra de la educación política.
El ser revolucionario bolivariano es un estado mental positivo, donde sentirse invencible frente a las adversidades mas difíciles es una cuestión de honor. Se alimenta este estado mental de una educación política, la cual el maestro Simón Rodríguez la llamaba: “Educación Mental”, esta tiene como propósito, que el ciudadano y la ciudadana se informe de todo lo que acontece tanto nacional como internacional, que se eduque para formarse una voluntad invencible y que aprenda bien algún oficio o profesión para ser útil en estrecho contacto con la realidad social del pueblo, con el fin de derrotar la ignorancia política del pueblo y la alucinación de muchos gobernantes.
Siempre, al terminar de escribir mis opiniones políticas, expresare mi respeto al lector que este o no de acuerdo con mis ideas. Gracias.
Tulio Marín CI 2999618
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